COMPETENCIAS EN EDUCACIÓN
Las tecnologías de Comunicación actual me han privilegiado al asistir a grandes seminarios de educación en diversos lugares del mundo, algo realmente extraordinario ser testigo casi presencial del trabajos que se están realizando en muchos países por hacer realidad una educación igualitaria para todos los estratos sociales y de excelencia en su calidad.
Estos esfuerzos promueven el cambio más grande de la humanidad y con ello una nueva forma de vida, creo que es el momento para ir revisando algunos conceptos, puesto que las palabras tienen fuerza y cobran vida por si misma y que en muchas ocasiones por su omisión o el mal uso de ellas permite las desviaciones humanas o cegueras que nos hacen perder el horizonte.
Competencias en la Educación, una dificultad para el cambio
Cuando se usan adecuadamente las palabras, siempre se logra la intención, los objetivos cuándo se plantean con sus contenidos y conductas adecuadas, son alcanzados fielmente. En Educación si planteamos desarrollar competencias, se obtienen competencias que es distinto a decir desarrollar aptitudes, Las competencias como un sello personal especializado en cualquier área del quehacer humano, son un aporte al egocentrismo y al egoísmo en general , es decir si soy competente, tengo mi futuro asegurado, no interesan los demás, soy el ganador y eso me hace sentir bien, es decir no me importan los demás mientras yo esté bien , por lo tanto ya no se puede hablar de sociedad, es individualismo absoluto.
Para la excelencia en la educación , es necesario considerar lo señalado en el párrafo anterior. La auténtica Educación está en ponerse al servicio de los demás, si mis esfuerzos son apoyados por mis aptitudes, los resultados son “competencias” de entrega leal a la sociedad.
Las aptitudes son el sello personal y la fuente de energía natural de expresión corporal o intelectual (habilidades y destrezas) que tenemos los seres humanos, se desarrollan en la medida que se van descubriendo individualmente en su propio interior.
El crear competencias en las personas, el gran error es intentar otorgar habilidades o destrezas a través de la inducción artificial y sistemática de “aptitudes inducidas” donde se requiera desarrollar destreza y habilidades para el mundo laboral sin considerar si existen o no las aptitudes.
Si queremos cambiar la educación, usemos las herramientas humana con sus virtudes originales que nos permiten vivir en armonía dentro de una sociedad.
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